Queridos ciberfashionistas y trendenciosos ¡Sí, estoy de vuelta! Últimamente me paso de los días volviendo a todo, lo cual hace que ande algo disperso (…) el otro día tuve la suerte de entrevistar a David Delfín, durante una de mis maratonianas jornadas en Cibeles, y al preguntarle por su estado actual, me lo definió de “efervescente”. En ese momento me sentí más identificado que nunca con Delfín, acabando con mi creencia de que el único punto en común entre él y yo era el ser malagueños (aunque uno ejerza más que el otro, y no, no diré quién).
Efervescente, que bonito estado y que completa palabra. Como completo han sido mis días en Cibeles. Tengo la suerte de haberme rodeado de gente tan estupenda y especial que he de reconocer que la vuelta y toma de contacto ha sido algo traumática.
Pero como decía, estoy en un momento efervescente emocional y laboralmente. Retomo en breve mis estudios, cierro una etapa laboral y sin ahondar en exceso en mis emociones, msn me elige como uno de los mejores Blogs para seguir Cibeles, y por si fuera poco, al día siguiente me invitan a la Semana de la Moda de París a los desfiles de Amaya Arzuaga y Loewe. Sí, parece en sueño, de hecho no me lo creo aún.
Y sí, si esto es un Blog de moda ¿Qué hago que no he empezado a hablaros aún de alguna tendencia, celebrity o descubrimiento? ¡Tranquilos que ya empiezo, impacientes!
En el Post de hoy he querido rescatar una inspiración o corriente, cuyo arraigo no es suficientemente fuerte para considerarlo tendencia, que me ha llamado especialmente la atención de cara a la temporada que viene. Todo vino en el viaje que hice a Madrid para asistir a la Fashion Night Out en compañía de la revista Elle con Carmen Kass (a la que he tenido la suerte de conocer en Cibeles) en portada. En el editorial, Carmen lucía un estilo militar que me llamó especialmente la atención. Se trataba de una vuelta de tuerca a la inspiración militar de temporadas pasadas con Balmain como protagonista. Era un look mucho más contemporáneo con gorra de policía y looks firmados por Versace que bien recordaban a la estética de la marina estadounidense.
Visto esto vino a mi mente una colección que me encantó en su momento y con la que tengo un auténtico flechazo, la de Moschino para este otoño. Rosella Jardini, la directora creativa de la casa, propuso un espectacular juego de masculino y femenino y llevó el estampado floral a sobrios sastres y trajes de esmoquin que cómo no se combinaban con detalles de inspiración militar y con la gorra que lucía Carmen Kass en el editorial de Elle (…)
Sí, lo se, realmente es una curiosa y compleja asociación mental la que hice para rescatar la propuesta de Moschino, aunque, si lo pienso, creo que no solo es mi vida, sino que la moda también está efervescente ¡Feliz Semana! ¡Nos veremos a la vuelta de Paris!
(El Post se lo dedico a todos los que habéis conseguido que en Madrid me sienta como en casa, y a los que sabéis de sobra que llenáis un hueco muy importante en mi vida)
